Homenaje a "los olvidados" del Toreo.

 

   

 

 Como fotógrafo y revistero taurino, he podido comprobar lo que me dijo mi amigo Roger Merlin (Presidente de la Federación de las Sociedades Taurinas Francesas) al regresar de una reunión en Sepúlveda con el matador Alberto Aguilar. Me contó que incluso el torero A. Aguilar quedaba "espanta'o" por la diferencia entre la afición española y francesa.

 

Sin embargo, lo que a mí me preocupa, es que cada feria, cada plaza propone los mismos carteles con toreros famosos, y si quiero ver a un torero menos conocido, pero que propone arte y/o valor tal como  Morenito de Aranda, Fernando Robleño, César Jiménez o el novillero Alberto Pozo por ejemplo, tengo que alejarme de plazas « de primera ». A mí, no me plantea ningún problema; ¡ mejor ! prefiero alejarme del runrún de las grandes ferias e ir a plazas de menos pretigio porque me gusta la esencia pura del toreo, que sea practicado por Matadores, Novilleros, Banderilleros, Picadores.

 

Lo que sí me molesta es que estos maestros menos considerados nunca tendrán (si así sigue la cosa) la oportunidad de torear más que unas diez  corridas al año, a no ser que triunfen de sobresalientes.

 

 

 

 Recordemos: César Rincón nunca cambió su forma de torear. En Madrid solía actuar cada año (desde su alternativa en 1981) durante "La San Isidro", sólo una vez,  además con ganado de "segunda mano"; luego regresaba a Colombia.

Acabó por ser una gran figura pero tuvo que esperar un milagro:

en el año 1991 en Madrid, por fin tuvo suerte al sorteo y cortó dos orejas. Al día siguiente fue repetido (de sobresaliente): dos orejas más. El 6 de junio, casi diez años trás haber sido doctorado, César Rincón cortó de nuevo dos orejas y entró en la leyenda  del toreo saliendo por tercera vez a hombros de la capital española.

 

Igual pasó con "El Fundi": tan pocos contratos obtenía que estuvo a punto de dejar los toros, cuando en el año 1989 toreó una corrida "de fín de temporada" en Arles (plaza de"categoría" en Francia) y cortó una oreja. Claro que fue repetido durante la siguiente feria de abril con toros de Miura y salió a hombros. Empezó así su carrera: esto pasó en el año 1991 mientras que su alternativa la tomó en el año1987.

Hoy, jubilado, es director de la Escuela de Tauromaquia de Madrid.

¿Quién lo hubiera pensado en los años “90” ?

 

César Rincón, "El Fundi" son ejemplos patentes entre muchos otros… Por desgracia "sigue la cosa" y hay un montón de ejemplos de este tipo hoy en día.

 

Tomemos un ejemplo reciente. Volvamos a la temporada pasada: antes de triunfar de sobresaliente en Sevilla a causa de la herida de El Juli,  ¿cuántos contratos tenía Manuel Escribano en el bolsillo?  En el año 2011 :11.

Recuerdo particularmente una corrida en el 2012: la actual figura Manuel Escribano aquel año apenas sobrepasaba los 10 contratos.  Lo ví actuar en un pueblo (Tyrosse, Francia):  salió fenomenal : resultó  herido en la región del pene, y a pesar de la cornada luchó, se jugó la vida como si estuviera en Las Ventas actuando para la "Corrida de la Prensa". Luego, se acabó « el cuento» en Francia para Escribano después de aquella tarde : ya no lo ví más en Francia aquel año: en el 2013 se volvió figura del toreo  gracias a una estupenda temporada.

 (Manuel Escribano en aquella corrida en 2012)

 

 

 Pero ¿cuántos  « Escribanos" esperan que por fin "suene el teléfono"?

 

Aparte de los matadores, no hay que olvidar a los demás toreros. Me refiero a los picadores, a los banderilleros y a los peones:

Ellos también siguen luchando para encontrar la fortuna: estar en una cuadrilla fija y torear cada tarde. Para ellos, igual que para los demás, torear es una necesidad.

En efecto si se dedican a una pasión en primer lugar, no hay que olvidar que torear es también para ellos un trabajo."El Gusanillo" es una cosa, pero también como todos los toreos tienen que sobrevivir  en un mundo en plena crisis económica. Entonces, resulta imprescindible que todos puedan torear.

 

 

 

Dicho esto, de ningún modo quiero dar a entender que los aficionados dejen de ir a ver a las figuras. Al contrario. Pero, sólo sueño con ver a estas figuras haciendo el paseíllo con los a quienes llamo : "los olvidados del toreo”.

                               

( Todos Toreros ).

 

 

 Este texto es un homenaje a todos aquellos toreros que siguen luchando día a día, golpe a golpe aguantando y esperando su oportunidad.

¡ Vá por ellos ! 

ENLACE :Análisis y comentario por el maestro Julián MAESTRO.

 

Texto y fótos: M. Vargas.